¿Las tragamonedas son un vicio?

¿Las tragamonedas son un vicio?

Las máquinas tragamonedas, representan el juego de azar más popular y difundido a nivel mundial. Esta realidad puede llevar a que te preguntes ¿Las tragamonedas son un vicio?

Las tragamonedas en sí mismas, son una fuente de entretenimiento y diversión; además de generar ganancias extras en algunos casos. No deberían representar ningún tipo de problema.

¿Las tragamonedas son un vicio?

La realidad es, que el uso desmedido, descontrolado e indiscriminado de los juegos de azar, en especial de las máquinas tragamonedas; representa un riesgo potencial para la salud, convirtiéndolo en un vicio y con el inminente riesgo de convertirse en una adicción, llamada ludopatía.

Desde el momento en que al apostador, se le hace imposible controlar el tiempo de juego; se comienza a considerar como un adicto, ante esa necesidad psicológica persistente, que llega a afectar cada aspecto de la vida del individuo.

Aunque es difícil de controlar, ¡combatir una adicción es posible! Evitarlas es más sencillo, siguiendo algunas recomendaciones e identificando los síntomas.

Principales síntomas de adicción a las tragamonedas

  • Te cuesta parar de jugar; además eres incapaz de dejar de perder tu tiempo en el juego.
  • Gastas más dinero en el juego del que puedes pagar. Te endeudas cada vez más o tomas dinero destinado para otras cosas y lo usas en el juego. Eres capaz de hacer cualquier cosa para conseguir dinero y destinarlo a las apuestas.
  • Continúas jugando para recuperar dinero perdido, o para conseguir ese dinero extra que estas necesitando.
  • Antepones el juego y tu necesidad de jugar, a los compromisos familiares, laborales y personales.
  • El juego cambia y afecta tu carácter y personalidad. Te pones de mal humor cuando no juegas o juegas con ansiedad y por la necesidad de hacerlo, no por diversión,

Existen otros síntomas, en su mayoría ligados a los ya expuestos. Sin embargo, saber identificar los síntomas a tiempo es la clave; para evitar que el placer se convierta en vicio.